Es común que cuando se trata de estar en forma, piensas sobre cómo luce el cuerpo en el exterior. Los cambios que obtienes en el exterior como resultado del aumento en actividad física usualmente son el factor principal de motivación que pone a las personas en movimiento. Las personas desean ver los resultados de su arduo trabajo en la báscula y en el espejo. La idea de tener una cintura más delgada o piernas más delgadas a menudo hace que las personas se levanten del sofá al gimnasio. Sin embargo, ¿qué si te digo que la verdadera belleza y los beneficios que ofrece la condición física se encuentran debajo de la superficie?
Ya he compartido que los cambios externos por un estilo de vida activo y saludable suceden lentamente. Pero, muchos cambios que suceden en el interior del cuerpo en realidad comienzan tan pronto empiezas una rutina de ejercicios. Yo creo que los beneficios de tener un corazón en forma y cambios positivos en el interior del cuerpo sobrepasan los cambios que vemos en el exterior.
Lo básico de los ejercicios cardio: El ejercicio cardiorrespiratorio (también conocido como “cardio”) es el término que se usa para describir los ejercicios que hacen trabajar al corazón y al sistema cardiovascular. Este sistema tiene que trabajar todo el día, todos los días, para poder mantenernos vivos. Yo describo el ejercicio cardio simplemente como el movimiento que hace trabajar más a este sistema. Los ejercicios como correr, andar en bicicleta y nadar, son todos ejemplos de ejercicios cardio. En mi opinión, deberíamos de cambiar cardio a “entrenamiento para fortalecer el corazón” ya que el corazón es un músculo y el ejercicio ayuda a mejorar la habilidad del corazón para el bombeo de la sangre. Aquí te explico algunos de los beneficios internos que ofrece el ejercicio cardio:
- Frecuencia cardiaca en reposo más baja: El corazón tiene que trabajar más durante el ejercicio al bombear sangre a una frecuencia más rápida. Como resultado, se hace cada vez más eficiente en el bombeo de sangre en general. Esto puede hacer que las actividades cotidianas parezcan ser más fáciles con el tiempo ya que el corazón necesita trabajar menos para sobrellevarlas. Usualmente puedes ver este cambio en una frecuencia cardiaca en reposo más baja.
- Pérdida de peso: Cuando aumentas el nivel de actividad con los ejercicios cardio, el cuerpo tiene que quemar más combustible para poder cumplir con la demanda de energía. La grasa almacenada es la fuente principal de combustible para el ejercicio cardio prolongado. Este aumento de gasto de energía, en combinación con un consumo reducido de calorías, puede conducir a una pérdida de peso significativa.
- Reducción de estrés: El ejercicio cardio promueve la producción de neurotransmisores en el cerebro que te hacen sentir bien, conocidos como endorfinas. Esta función a menudo se conoce como “euforia del corredor”, pero el jugar tenis o hasta caminar también pueden contribuir para la misma sensación. El ejercicio cardio usualmente puede sentirse como la meditación en acción. Cuando comienzas a ejercitar y enfocarte en lo que estás haciendo, podrías reducir el nivel de estrés. Como resultado, una vez que termines, a pesar de que te sientes cansado físicamente, te sentirás mentalmente rejuvenecido.
Existen tantas buenas razones para incluir el cardio en tu rutina actual. La más importante es porque es bueno para el corazón.
*Fuente: Samantha Clayton, vicepresidenta de Rendimiento Deportivo y Educación Física Mundial de Herbalife Nutrition.